Visitar Casa FOA, para mí, es un ritual que vengo repitiendo desde que soy muy chica. Me encuentro con amigos, conozco nuevos talentos, puedo ver el resultado del trabajo de gente que quiero y que acompañé en el proceso de la obra. Este año están involucrados amigos queridos, decoradores que conozco mucho y admiro (y cuando querés, siempre ves todo con la mirada del cariño), así que intentaré se lo más objetiva posible.
¿Qué me gustó?
1. El atrevimiento de combinación de color y texturas en el espacio Nouveau Retro, realizado por Mariana Pussaq de Casa Almacén y Julia Tonconogy Pfeiffer. Ese color ocre, combinado con los azules y verdes profundos fueron un poco más allá en la propuesta visual y eso me gusta. Si bien son colores de tendencia en Europa, fueron adoptados e re conceptualizados con la mirada local, en tapizados de un mobiliario con una genial selección de clásicos conporáneos y las obras de arte de Elenonora Molina (Miranda Bosch Galería) que sumaron muchísimo a lograron el clima perfecto en la puesta en escena.
2. El pequeño cuarto de influencer realizado por Josefina Somoza y María Galante fue para mí de lo mejor de la muestra. Me fascinó la combinación del azul profundo con las bibliotecas de bronce colgantes desde el cieloraso.
3. Malena Perkins y Tomás Magrane, para mí merecen un capítulo especial, porque pudieron interpretar el espíritu de Mercado Libre de manera genial y reconvertirlo con su mirada más osada, que siempre va un paso más allá en el uso de materiales y recursos. El sillón curvo fue el gran éxito (la cantidad de lectoras que me escribieron preguntando por él!) y las bibliotecas de hierro de obra oxidado, otro hit. Ni hablar de la reutilización de clásico granito en gris mara, pero en su versión opaca, otra novedad.
4. El departamento de Ana Azzano, que la representa a la perfección con su calidez y buen gusto. Era como llegar a su casa, pero en FOA.
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Con Ana Azzano en la jornada de prensa, recordando lo bien que lo pasamos cuando viajamos a hacer fotos de su casa de Barreal, Provincia de San Juan, con Revista Living., |
5. Vivi el proceso del espacio de Sofi Willemoës muy de cerca, gracias a una producción que hice para Living (que aún no salió publicada) hace varios meses. Creo que el muralismo naturalista es un recurso utilizado mucho a fines del siglo XX y que hoy vuelve re conceptualizado. En este caso, el mural Iberá, rinde tributo a nuestros Esteros del Iberá y despierta conciencia sobre su biodiversidad y el cuidado que debemos darle, porque es un tesoro que está acá cerquita y abre sus brazos para que todos lo disfrutemos. Los sillones de Carmen, también de origen correntino, cierran el círculo (feliz de haber sido el hada madrina de esta unión).
¿Qué no me gustó?
(aclaro que estos comentarios están hechos desde el mayor respeto y cariño a los organizadores de FOA a quienes admiro mucho por su gran trabajo).
1. Conocí esos departamentos cuando eran viviendas y eran plantas amplias y luminosas. Me sorprendió, cuando llegué a la jornada de prensa, encontrarme con espacios tan reducidos, como si fueran vagones de tren. No había quedado nada de esos departamentos. Quizás en mi imaginación, pensé que iba a ver cómo distintos diseñadores resolvían livings, dormitorios, baños de los distintos departamentos, para sacar ideas más concretas para nuestras casas. Me imaginaba algo más parecido a una vivienda y no espacios sueltos. Imagino que hay razones comerciales que pesan, pero sería genial lograr un equilibrio.
2. Cuando era chica iba cada año con mi mamá a Casa Foa. Aún hoy me acuerdo de la cocina de rojo furioso de Gloria César, el restaurante inmenso y soñado de Dorotea Oliva en Abril, los dormitorios con género vichy de María Silvia Loitegui para Boutique de Para Ti. Siento que estos últimos años se perdió ese atrevimiento y todo se volvió un poco más demagógico, más comercial, más obvio.
3. Visité Foa a las 10 de la mañana y la mayoría de las ventanas de los espacios tenían las cortinas cerradas con las luces prendidas, los corredores eran oscuros. Aún no entiendo por qué cuando hay ventanas con vistas tan lindas las cierran. Todo es más inspirador con luz natural.